Proyecto
En las últimas décadas, muchas ciudades de todo el mundo han desarrollado nuevas infraestructuras de transporte y planes de movilidad. El objetivo de estos planes no es solo construir nuevas vías de transporte y utilizar nuevos vehículos, sino también generar nuevos tipos de ciudades y ciudadanos. Pueden ser muy diferentes, incluso contradictorios: desde planes de «desarrollo» de carreteras para uso de automóviles, hasta planes de movilidad “sostenible” que ponen limitaciones a los automóviles a motor en favor de la peatonalización, los vehículos individuales no motorizados como las bicicletas y el transporte público (posiblemente eléctrico).
En este proyecto proponemos un conjunto de etnografías móviles de estos procesos de desbordamiento, a partir de seis ciudades radicalmente diferentes: Barcelona, Lisboa, Zinguichor, Malabo, Inhambane y Ramallah. A pesar de sus diferencias, están unidas por un mismo proceso de globalización y desregulación de personas, productos y tecnologías que a menudo choca con los planes de movilidad y ciudadanía. Nuestro objetivo es construir un cuerpo de conocimiento comparativo a través de nuestras etnografías móviles, donde se puedan escuchar las voces de los conductores, ciclistas, usuarios e incluso víctimas de estos procesos, junto con urbanistas y reguladores, para abrir un diálogo que pueda ayudar a evaluar tanto los límites como las posibilidades de los planes e infraestructuras de movilidad.